¿Qué se sentirá al recibir un ramo de flores? ¿Y una caja de bombones? ¿Y el famoso gesto del hombre arrodillado entregándote un anillo como símbolo de su amor?
¿Por qué será que no entiendo nada de todo eso? ¿Por qué será que pienso que todas esas son nimiedades, que el amor es energía que traspasa cualquiera de esas expresiones materiales? ¿Acaso alguna de todas esas cosas es necesaria? ¿Por qué esa necesidad de exhibir lo que uno siente o lo que el otro siente como si fuera un trofeo?
¿Y esa otra maldita necesidad de querer cambiar al otro? (De querer cambiarlo para que se parezca a uno). ¿Para qué? ¿No es absolutamente aburrido? ¿Y si nos aceptásemos en nuestras diferencias, entendiendo que en la diferencia, y no en lo semejante, está lo maravilloso? Entender que descubrir y aceptar la diferencia en el otro, es descubrirse y aceptar la diferencia en uno/a mismo/a.
No hay comentarios:
Publicar un comentario